BURGOS, 6 DE FEBRERO DE 2019. El Instituto Tecnológico de Castilla y León (ITCL) ha acogido hoy la primera reunión de trabajo del proyecto europeo ‘Working Age’. Una iniciativa que nace con el objetivo de promover hábitos saludables de los usuarios en su entorno de trabajo y actividades de la vida diaria, y que se encuentra dirigida a los empleados mayores de 50 años, a tenor de la tendencia que existe en los países europeos de incrementar la edad laboral por encima de los 65 años.
ITCL lidera este proyecto en el que participan otras entidades como la Universidad de Cambridge, Politecnico di Milano, Exodus S.A., Green Communications SAS, Brainsigns SRL, Reinisch-Westfaelische Technische Hockschule, Telespazio France SAS, Audeering GMBH, European Emergency Number Association ASBL, Fundación Intras y Telematic Medical Applications LTD. Precisamente, representantes de estas entidades se han dado cita hoy en Burgos en un encuentro que se ha celebrado los días 5 y 6 de febrero.
AGENDA H2020
Durante el desarrollo de estas dos jornadas de trabajo, los socios del proyecto han sentado las bases de las líneas de desarrollo que van a desempeñar en ‘Working Age’. Un proyecto, que cuenta con una financiación de cuatro millones de euros del programa H2020.
En concreto, y según explican los responsables de ITCL, el proyecto “tiene su origen en el alargamiento de la vida laboral y en el objetivo de buscar que las personas puedan desempeñar su trabajo con las mejores condiciones posibles”. Así explica Carlos Alberto Catalina, responsable de la Unidad de Investigación, Simulación y Realidad Virtual del ITCL, quien ve en este proyecto “un punto de partida para que los empleados mayores de 50 años puedan ganar calidad de vida en el desempeño de sus funciones”.
“La idea es poder crear una herramienta que nos permita ir promoviendo que, según el tipo de trabajo que se lleve a cabo, se avise al trabajador de la necesidad de realizar cambios posturales o descansos para aliviar situaciones de estrés”, concretó.
Así, el proyecto ‘Working Age’ estudiará los requisitos laborales, físicos y mentales, del lugar de trabajo en tres entornos diferentes, como son Oficina, Manejo y Fabricación. Además analizará los hábitos de vida de los trabajadores mayores de 50 años. La información obtenida se utilizará para la creación de acciones que conduzcan a un envejecimiento saludable dentro y fuera del entorno laboral.
Entornos diferentes y necesidades
El trabajo medirá, de la misma forma, las necesidades de quienes se encuentren trabajando en oficina, o quienes lo hagan en producción, si hablamos de una industria. En este sentido, “se medirán los ritmos a partir del análisis de acciones repetitivas en el caso de personas que trabajan en producción, al tiempo que se analizarán procesos relacionados con el estrés para quienes desempeñen funciones de oficina”, concreta Catalina.
Asimismo, Maite Cobo, responsable de Proyectos Europeos de ITCL indica que es necesario analizar, del mismo modo, cuestiones ambientales y de cada entorno o país. “Hace unos años vimos como en Francia había muchos casos de estrés laboral, y de ahí que sea necesario analizar las condiciones del entorno, del tipo de vida y del país”, agrega la responsable que entiende que “el entorno laboral” es diferente en unos países y en otros.
Potencia digital e innovación
‘Working Age’ se engloba dentro de las acciones que desarrolla la Unión Europea para estimular la innovación en el ámbito de la salud y la industria mediante la exploración de la aplicación de tecnologías avanzadas para mejorar la salud de la fuerza laboral y promover nuevas normas. El objetivo final es explorar el potencial digital y la innovación en el ámbito de la salud .
ITCL como líder de proyecto participará en el desarrollo de interacciones para mejorar malos hábitos, a través de realidad aumentada, mediante un agente de conversación móvil front?end. Al mismo tiempo, se va a trabajar en la creación de la detección de patrones de movimiento con visión artificial y en la plataforma IOT, mediante el desarrollo e integración de sensores portátiles. Este proyecto tiene una duración de 36 meses. En España, se va a desarrollar un proyecto piloto en el que se va a contar con la colaboración del Grupo Antolin.
Las áreas implicadas en el proyecto son las de Simulación y Realidad Virtual y la de Electrónica Aplicada e Inteligencia Artificial. En este proceso, el área de Simulación y Realidad Virtual identificará los gestos del trabajador para poder ofrecer instrucciones a través de Realidad aumentada, para ello se creará un avatar. El área de Electrónica Aplicada e Inteligencia Artificial, por su parte, desarrollará sensores que se adaptarán a las necesidades del proyecto.
Las acciones que contempla este proyecto son muchas pero lo importante es crear una plataforma que tenga en cuenta las necesidades, tanto emocionales con físicas, del trabajador para cuidar su salud y así aumentar su vida laboral.
A la hora de analizar los hábitos en el entorno laboral se contará con la colaboración de Mutua Universal y con la European agency for safety and health at work, EU-OSHA, y con diferentes hospitales para ayudar a crear los hábitos en función de los riesgos que presenten los trabajadores. Además, el proyecto pretende crear una metodología que promueva buenos hábitos en el trabajador.