Simuladores de conducción como base para mejorar la seguridad vial

Simuladores de conducción: la clave para minimizar riesgos y obtener el carné de conducir de forma segura

Minimizar riesgos es una de las premisas de la seguridad vial. En este punto, uno de los aliados para sumar un plus puede y debe ser la integración de simuladores de conducción. Soluciones tecnológicas que pueden ser de gran ayuda para aprender a conducir un vehículo y sacarse el carné de conducir evitando daños y disminuyendo los riesgos. 

Hemos de tener en cuenta que un accidente en un simulador no hace daño a nadie ni cuesta dinero. Además, se pueden entrenar fácilmente situaciones específicas, como conducir de noche o con tiempo adverso. Sin embargo, en la práctica estos simuladores apenas son utilizados en autoescuelas… Un estudio en que participó ITCL reveló que, a pesar de su efectividad, pocos países en Europa tienen regulado su uso. Y en estos casos siempre es opcional.

En investigación, estos simuladores son utilizados frecuentemente: en el sector de automóvil por ejemplo para probar nuevos dispositivos de seguridad (los llamados ADAS, Advanced Driver Assistance Systems) o coches autónomos. Pero nos vamos a centrar ahora en otra aplicación: estudios de comportamiento de conductores, que es lo que estamos investigando en ITCL en una serie de proyectos desde hace varios años. Es una línea que está generando impacto para dar pasos adelante en la mejora de seguridad vial.

¿QUÉ ES UN SIMULADOR DE CONDUCCIÓN?

Vamos a considerar el simulador como un conjunto de sensores con el que se puede capturar muchos datos diversos relacionados con la conducción, porque ciertamente los hay. El núcleo de un simulador es un software sofisticado, por ejemplo, ejecuta cálculos complejos de los movimientos del coche en función de sus características; como las dimensiones y el peso, la fuerza del motor, la condición de la superficie de la carretera, el manejo del conductor. Además, contiene toda la información de tráfico, las vías y condiciones atmosféricas. Esto hace del software una fuente de datos muy interesante que se pueden aprovechar en esos estudios mencionados arriba. Cada vez más centros de investigación utilizan estos datos para sus estudios. 

En el software de simulador IRIS de ITCL, complementamos estos datos con lo más importante para seguridad vial: el factor humano. Recogemos datos del conductor mismo, por ejemplo para entender mejor acciones peligrosas. Completamos así lo que llamamos el triángulo de datos: con datos de los tres aspectos de la conducción: el conductor, el vehículo y el entorno. 

• Datos del conductor son por ejemplo la carga de trabajo y la fatiga; importantes influencias en su capacidad de conducir. Se miden con sensores de actividad cerebral, pulso cardiaco, sudor etc. Para la mayoría de estas mediciones contamos con expertos de otras organizaciones europeas. 
• Datos del vehículo pueden ser velocidad y aceleración, posición de pedales y volante, e información más avanzada como por ejemplo distancia al vehículo anterior. 
• Datos del entorno refieren al tráfico alrededor (tipo, posición, velocidad, etc.), infraestructura incluyendo rotondas, señales, bordillos, y también condiciones como lluvia, niebla, luz de día o noche.

SEGURIDAD AVALADA DESDE EUROPA

En el caso de FitDrive, el consorcio coorganizó dos sesiones en el Parlamento Europeo en Bruselas, en las que dimos recomendaciones para la nueva Directiva de Permisos de Conducción. Trabajamos con la Comisión Europea para mejorar la próxima actualización de la regulación de homologación de vehículos – primero para hacer disponibles señales del vehículo que permiten monitorizar la conducción, y segundo para incluir una definición de niveles de fatiga que permite estandarizar los avisos al conductor, los controles por autoridades, el paso del control de coches autónomos al conductor.

Además, organizamos una conferencia con el secretario de estado de transporte de Irlanda, presentamos resultados FitDrive en el stand de la Comisión Europea en la conferencia TRA2024 -Transport Research Arena- en Dublin, ITCL presentó resultados en RTR2024 -Road Transport Research- en Bruselas, llegando a miles de profesionales. ITCL y BrainSigns presentaron conjuntamente IRIS en la conferencia DSC2024 -Driving Simulation Conference Europe- en Estrasburgo.

La colección avanzada de datos con simuladores de conducción IRIS de ITCL hace posible crear este impacto, que esperemos puedan hacer nuestras carreteras un poco más seguras. Y quién sabe, con las nuevas regulaciones europeas, quizás sí veremos simuladores en las autoescuelas también. 

PROYECTOS ITCL SIMULADORES CONDUCCIÓN

 Algunos proyectos realizados en esta línea por ITCL que destacamos:

• SimuSafe: Liderando un consorcio europeo de 16 socios, en el que se estudió la usabilidad y sesgo de simuladores en la investigación de seguridad vial. Se creo un sistema de simuladores de coche, moto, bicicleta y peatón interactuando en un mismo entorno simulado. En este proyecto se realizó el estudio de simuladores en autoescuelas con que empezamos este blog.
• Mindtooth: Desarrollo de un novedoso dispositivo EEG para medir actividad cerebral de manera muy práctica y precisa, también en un consorcio europeo. EEG da información muy relevante sobre el estado mental del conductor que influye en su conducción, pero dispositivos de calidad suelen ser laboriosos e incómodos para usar. Mindtooth es propiedad de las empresas colaboradores BrainSigns y Brain Products; ITCL colaboró en la aplicación en simuladores de conducción.
• Genius: En un consorcio nacional liderado por Antolín, monitorizamos la cabina del vehículo y el conductor, para conocer el estado cognitivo y emocional del usuario. Con esta información se tratará de mejorar el confort del conductor con diferentes estímulos, que finalmente debe llevar a una conducción más segura.
• FitDrive: Este proyecto en curso, coordinado por ITCL en un consorcio europeo, se centra en conductores profesionales como camioneros y repartidores. Con la ayuda de la IA se trata de detectar patrones individuales en el triángulo de datos que indican los inicios de fatiga, y también otros impedimentos que provocan conducción fuera de lo habitual. Actuales sensores de fatiga son poco efectivos porque son iguales para todos los conductores mientras cada persona reacciona diferente en estas condiciones.

Es una obviedad que la investigación por sí sola no mejora la seguridad vial, es necesaria la participación del resto de agentes involucrados. Trabajamos con autoridades y con la industria para mejorar la seguridad vial con los resultados obtenidos.