Nube: ¿híbrida o privada?

Lanzar nuestro negocio a la nube no es una cuestión de por qué, sino de cómo y cuándo. Al final nos tendremos que adaptar a las nuevas tecnologías. ¿Pero qué es lo que promete la nube en contraposición a las arquitecturas tradicionales? La nube ofrece ciertas ventajas como la velocidad, agilidad y ahorro de costes, pero en el otro lado de la balanza encontramos, la seguridad de los datos, el cumplimiento de las regulaciones, la gestión de costes y la necesidad de un cambio a nivel organizativo.

Para poder tomar una decisión es necesario conocer las opciones existentes en el mercado las desventajas y ventajas de cada una de ellas por lo que vamos a dar unas pinceladas de en qué consiste cada uno de los tipos de nubes cuales son sus ventajas e inconvenientes.

Las nube públicas consisten, básicamente, en el alquiler de partes de las infraestructuras de centro de datos distribuido. Una de sus mayores ventajas es el escalado económico y bajo demanda, además de flexibilidad y ejecución totalmente automatizada.

Ventajas:

• Escalabilidad (tanto ascendente como descendente). Casi ilimitada gracias a los recursos de nube bajo demanda.
• Menor gasto de capital. No tienes que comprar todos los equipos de forma individualizada, además del ahorro en la instalación, mantenimiento y actualización periódica de los sistemas.
• Fiabilidad. Estas infraestructuras garantizan los servicios distribuidos por lo que son bastante tolerantes a fallos.

Inconvenientes:

• Menor control sobre los datos. La ubicación de los datos es desconocida por lo tanto no se conoce bajo qué restricciones geográficas o de otro tipo, están funcionando tus datos.
• Mayor gasto operativo. A medida que se escala el rendimiento, aumentan los costes por hora.

En el caso de las nubes privadas la gestión y el hardware corre de parte de la empresa o contratas a un servicio de terceros para que se encargue de hacerlo. En ambos casos las ventajas e inconvenientes son los mismos.

Ventajas:

• Seguridad, puesto que los datos y las aplicaciones permanecen tras tu firewall la empresa es la encargada de la seguridad de los mismos y por lo tanto solo se pueden acceder de forma interna. Por eso las nubes privadas son mejores para procesar o almacenar datos confidenciales.
• Coste total de propiedad potencialmente inferior. Una vez adquiridos los servidores estos no tienen más costos y no incrementa según el uso de los mismos.
• Mayor control y personalización. La empresa es la encargada de la gestión y personalización de los servidores.

Inconvenientes:

• Mayores costes. Aumento de los costes iniciales en la compra de servidores.
• Responsabilidad. Es la empresa la encargada del cumplimiento normativo, de la mantenimiento y seguridad del hardware y el software.
• Menos flexibilidad. Es más complicado aumentar o disminuir los recursos tecnológicos a medida cambian las necesidades ya que requiere de la adquisición de nuevos equipos.

Llegados a este punto tenemos ventajas e inconvenientes con ambas la pregunta sería ¿Qué características nos interesan de cada una de ellas? ¿Podrían combinarse ambas nubes? La respuesta es sí existen las nubes híbridas ¿Pero en qué consiste una nube híbrida? Estas son un entorno mixto de almacenamiento, computación y servicios compuesto por una infraestructura y servicios de nube privada y una nube pública, como Amazon Web Services (AWS) o Microsoft Azure, con orquestación entre las diversas plataformas .

Ventajas:

• Cargas de trabajo variable. No siempre se requiere que los datos se alojen en la nube pública por lo que se pueden utilizar estas para momentos puntuales con altos requerimientos y costes computacionales.
• Datos críticos. Separar entre datos críticos y confidenciales que deberían estar en la nube privada de aquellos no tan relevantes que pueden alojarse en nubes públicas.
• Adaptabilidad para el futuro. Este sistema permite una mayor adaptabilidad y a un ritmo ajustable a cada empresa y su problemática. En esta sociedad tecnológica tan variable comprometerse con una tecnología o un sistema puede ser un lastre en el futuro. La necesidad de adaptarse y cambiar de forma ágil las herramientas, sistemas, servicios es un principio fundamental.
• Posibilidades infinitas. Ofrece lo mejor de ambos mundos de tal forma que en caso necesario es posible cambiar el enfoque pero en un principio cubre todas las necesidades.

Si en vuestro caso existen varias soluciones de negocio y cada una requiere de un entorno adecuado según sus características entonces en este caso quizás la solución óptima sea una infraestructura pública y privada en definitiva una nube híbrida.