FAE entregó ayer sus premios a la innovación a cuatro empresas de la provincia
El camino de la innovación es siempre arduo y en muchas ocasiones lleno de sinsabores y decepciones, además de que son muchos los empresarios que transitan por esta senda en solitario y en un segundo plano. Es por eso que los premios como los que ayer entregó FAE a los mejores innovadores del año 2013 vienen a crear un «clima de ánimo compartido» y suponen un momento para que los empresarios innovadores se presten «apoyo mutuo». Esa es la opinión de uno de los ganadores de los premios de 2012, Eduardo Gómez, de Aples, compartida por el resto de galardonados ayer en el transcurso de la jornada dedicada a la innovación que se clausuró con la entrega de los reconocimientos de 2013. En esta ocasión los premios han correspondido a Johnson Controls (Varta); Ecoalia y Trasluz; y Naturae, cuyo director gerente, Juan Manuel Sanz Balsa derivó el premio a Juan Antonio Bacigalupe, que ayer recibía, por otra parte, el premio Cecale de Oro de 2013.
Innovar en sentido amplio
El presidente del jurado, José María Vela, director del ITCL, elogió el trabajo que llevó a las cuatro empresas seleccionadas a alcanzar el reconocimiento de FAE dada su condición de «emprendedores en sentido amplio» que han sabido encontrar un hueco en el mercado con nuevas ideas que abren vías de negocio en áreas como la producción o la comercialización con la «innovación como estrategia de competitividad». Ese es el fin por el que la Junta de Castilla y León lleva varios años apostando por mejorar la I+D regional mediante una estrategia enfocada a mejorar la competitividad de las empresas y contar con un capital humano especializado en innovar, en palabras de la directora general de la Agencia de Innovación, Financiación e Internacionalización Empresarial de Castilla y León, Mar Sancho. «Ambas cosas son fortalezas para la internacionalización» y un puntal para la creación de empleo.
