Fuente: Diario de Burgos
ITCL asesora a los emprendedores
Un año después de que naciera el programa Emprendedores de la Fundación Caja de Burgos, los organizadores de esta iniciativa avanzaron ayer que ya son siete los negocios que se han creado al amparo de esta idea y tres más los que se han beneficiado del apoyo para su consolidación que, incluso en uno de los casos ha llevado a una sociedad ya creada a ampliar su mercado en Sudamérica.
El resultado de esta tarea, que no se detiene y a la que este año se prevé destinar 285.000 euros para financiar los mejores proyectos, ha sido la generación de 19 empleos directos. Así lo detalló el director general de la Fundación Caja de Burgos, Rafael Barbero, quien destacó el papel del Instituto Tecnológico de Castilla y León (ITCL) en el asesoramiento a las empresas. Este organismo pone a disposición de los negocios unos tutores que se encargan de hacer un seguimiento de las ideas hasta que se transforman en negocios.
Los diez proyectos que han recibido este empujón no son los únicos que pueden prosperar ya que el programa ha seleccionado 25 de las 95 iniciativas presentadas. Ayer precisamente se presentaron dos que están en proceso y una más a la que se le ha ayudado a evolucionar.
La primera en contar su experiencia fue Xenia Tomás, quien, con dos socios más, en 2007 creó en Salas de los Infantes la empresa Arombait, dedicada a la elaboración de cebos naturales para pesca. En su caso, el asesoramiento recibido con el programa Emprendedores les ha servido, tal y como relató, para «firmar un contrato de cinco años en Chile». Se utilizarán para la venta de estos productos en pesca de merluza y pulpo.
También han llegado a Polonia, en donde sus cebos han recibido una buena acogida en la faceta deportiva y esperan entrar pronto en el mercado brasileño. «España se nos queda pequeña», afirmó ambiciosa. Defendió que son productos a la carta que destacan por su carácter ecológico al elaborarse con aceites de pescado, harinas…
Aún en proceso, Saúl Vallejo y Daniel Gallego presentaron unos sensores que permiten detectar el hierro y que esperan que puedan tener mercado en tareas de refrigeración (control de legionella), para la siembra de viñedos y frutales y para medir los niveles en depuradoras. Sacarán una tirada gratuita para evaluar su acogida.
Javier Castro, uno de los cuatro creadores de Neosonata, detalló que su idea ha sido crear una aplicación para que agrupaciones musicales de orquesta puedan tener allí sus partituras y puedan ver los cambios realizados en ellas incluso sin acudir a un ensayo.