¿Ética y valores en una sociedad robotizada? Los expertos sostienen que en la era de la robotización y la Inteligencia Artificial el ser humano no debe menospreciar el papel de la ética y de los valores que impregnan a la condición humana. Así, la tecnología ha de ser un aliado de la ética y al revés para evitar que el control lo tomen las máquinas.
“Tenemos que ser los seres humanos quienes controlemos el avance tecnológico y no al revés”. Así lo consideró en Burgos, José Luis Fernández Fernández, catedrático de la Universidad Pontificia de Comillas (ICAI-ICADE), quien ve cómo procesos como los que tienen que ver con la Inteligencia Artificial y su desarrollo “no se pueden desligar de la ética ni de los valores humanos”.
“No hay que frenar ese avance tecnológico, sino dirigirlo para que vaya a favor del ser humano”, indicó en la ‘Jornada Inteligencia Artificial.Presente y Futuro’ celebrada en la sede de ITCL Centro Tecnológico el pasado mes de octubre.
En este contexto, la sede de ITCL abrió el debate de cómo la ética ha de estar presente en los cambios sociales que derivan del gigante tecnológico. En esta línea, se entiende como el avance de la Inteligencia Artificial ha llegado para cambiar todo lo que podemos hacer en avances científicos, para proteger mejor nuestro entorno, curar enfermedades y “va a revolucionar nuestro comportamiento diario”.
Valores y tecnología
En este escenario de avance “imparable”, el también director de la Cátedra Iberdrola de Ética Económica y Empresarial indicó “lo importantes que son los valores en la denominada cuarta revolución industrial efectos”. “En todas las sociedades y grupos humanos hay gente, y en esos grupos hay personas que razonan y valoran qué es aquello que suma y qué es aquello que nos complica la existencia”, aseveró.
¿Mejores personas?
Si la tecnología puede convertirnos en mejores personas y en una sociedad mejor es una de las cuestiones que se llevan poniendo sobre la mesa desde hace varios años. En este punto, son muchas las personas y expertos en la materia que consideran que poner controlar un edificio con IA la luz de las ventanas y la temperatura puede hacer que los trabajadores estén más o menos estresados y contribuir al avance social.
Es por ello, que filósofos y científicos ya piensen que Inteligencia Artificial puede aplicarse al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU y/o a la la conservación del planeta, entre otros.
Impacto positivo o no
En cuanto al impacto que tendrán esos desarrollos tecnológicos en nuestras vidas, Fernández aseveró que en ese camino hacia la industria 4.0, el análisis de datos y todo lo relacionado con la Inteligencia Artificial “es necesario valorar cómo esas cuestiones pueden transformar al sujeto”. “Estamos en una situación donde la tecnología nos va a permitir hacer muchas cosas, pero hemos de valorar si esos impactos son positivos o no”.
El mensaje que trasladó Fernández es que “no hay que frenar ese avance tecnológico”, sino “dirigirlo para que vaya a favor del ser humano”. “La técnica ha de estar hecha para el ser humano”, apostilló..
En concreto, el ponente considera que los avances tecnológicos que hay en la actualidad y los que se presenten en el futuro han de estar asociados “a la mejora de la vida de las personas y nunca a lo contrario”.
En definitiva, se planteó que para poder avanzar y legislar se creen equipos interdisciplinares, conformados por abogados y científicos, y en los que se integren de igual manera filósofos y sociólogos, “para no olvidar nunca que somos humanos”.